Véase también el Glosario Genealógico para descripción de más relaciones de parentéscos, así como la entrada Tipos de Parentéscos.
En la antropología del parentesco, ego es una persona imaginaria
que sirve como referencia para la descripción del sistema de parentesco.
En español el género de ego no es relevante para la descripción del
sistema de parentesco como ocurre en otras lenguas.
El padre y la madre (conjuntamente llamados padres) son los ascendientes directos inmediatos de ego.
Lo habitual por esperanza de vida e intervalo entre generaciones es que
las personas convivan con todos o al menos varios de sus abuelos durante
su infancia. Los abuelos forman parte importante de la familia extensa.
En las culturas tradicionales, los abuelos han tenido un rol claro en
relación al cuidado de los niños. Esto ha tendido a desaparecer con el
desarrollo de la familia nuclear independiente. Sin embargo, los abuelos están recuperando en los últimos tiempos su papel en el cuidado de los niños.
El tatarabuelo y la tatarabuela son los abuelos de uno de los abuelos de ego, es decir, los padres de uno de los bisabuelos de ego. Cada persona tiene, por tanto, dieciséis tatarabuelos (si no hay consanguinidad). Aunque la esperanza de vida está en aumento, al incrementarse de igual modo el intervalo intergeneracional, son pocas las personas cuyos tatarabuelos alcanzan a conocerles.
El trastatarabuelo y la trastatarabuela, también llamados cuarto abuelo o cuarta abuela, son los padres de uno de los abuelos de uno de los abuelos de ego, es decir, los padres de uno de los tatarabuelos de ego. Cada persona tiene, por tanto, treinta y dos trastatarabuelos.